05/06/2025
Se trata de un programa piloto que es parte de una agenda amplia para promover los derechos sexuales y reproductivos de personas con discapacidad.
En el marco de las acciones del Estado para promover la inclusión y autonomía de personas con discapacidad en todos los niveles, el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, a través de Senadis, lanzó un programa piloto para facilitar la vida sexual plena de personas con discapacidad, a través del financiamiento de una ayuda técnica.
Se trata de una silla especial que permite el desarrollo pleno, de manera segura y con mayor autonomía e independencia, promoviendo la salud sexual y reproductiva de las personas con discapacidad.
La visibilidad de la vida sexual de las personas con discapacidad es clave para la eliminación de prejuicios, tabúes, barreras sociales y los estigmas con relación a la sexualidad y la discapacidad, lo anterior, considerando que cada persona experimenta su vida sexual de manera única.
La ministra de Desarrollo Social y Familia, Javiera Toro, relevó que “se funda en una convicción muy profunda de nuestro Gobierno que tiene que ver con promover la autonomía de todas las personas. Y también esto está en la base de lo que hemos estado construyendo con un Sistema Nacional de Apoyos y Cuidados, que no es solo apoyar la dependencia de una manera asistencialista, sino que es promover que todas las personas puedan ejercer la autonomía, decidir sobre su propio cuerpo y sobre sus propias vidas. La Convención de Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad establece los derechos sexuales y reproductivos, incluyendo el derecho a una vida sexual plena. Es, además, parte de una agenda más amplia que incluye, por ejemplo, la entrega que realizamos hace unos días del protocolo para la maternidad de mujeres con discapacidad”.
Por su parte, la directora (s) de Senadis, Karen Astorga, explicó que esto nació a partir de una iniciativa que obtuvo un Capital Semilla de Corfo, y “La silla se diseñó y fabricó en Chile. Como Servicio nos llamó mucho la atención, porque uno de nuestros compromisos pendientes con Naciones Unidas tiene que ver con incorporar proyectos e iniciativas en materia de salud sexual y reproductiva para mujeres y personas con discapacidad. A partir del éxito de este piloto, evaluaremos incorporarlo al catálogo del Programa de Ayudas Técnicas”, concluyó.
La alcaldesa de Quilicura, Paulina Bobadilla, agradeció la iniciativa que permitirá “entregar herramientas para que las personas con discapacidad tengan un buen desarrollo y también una sexualidad plena. Esto viene a fortalecer el trabajo que estamos haciendo. Hace cuatro años tenemos un centro de rehabilitación maravilloso con profesionales de primer nivel y esto nos viene a fortalecer”.
Rosa López, una de las primeras beneficiarias de la silla facilitadora, dijo estar muy agradecida de recibir esta ayuda técnica, puntualizando que la vida sexual “es un tema tabú, que no se toca en muchos lugares y que ahora se esté dando prioridad a esto y que sea en nuestra comuna, para nosotros ha sido maravilloso. Así que muy agradecida, porque en el fondo somos personas y nos merecemos esto y más”.
Según el III Estudio Nacional de la Discapacidad, III ENDISC, el 17,6% de la población de 18 años y más tiene discapacidad, es decir, 2 millones 703 mil 893 personas, en el país.